LOS HECHOS

José Inés Figueroa Vitela

25/06/2018

La última carta

La Escuela de Graduados en Gerencia Política George Washington, asentada en la capital norteamericana, en la convocatoria a su curso próximo alude en sus asignaturas a fenómenos como, la injerencia e interferencia de factores tecnológicos sobre los comicios y herramientas informáticas en las campañas electorales.
Big Data, datamining, microsegmentación, hackers, trolls, fake’s, son tratadas como “armas poco convencionales con fines declarados de cambiar la voluntad del elector, no siempre dentro de un marco ético y mucho menos legal”, explica la invitación a los potenciales educandos.
Eso, que para algunos pudiera ser el argumento de alguna novela futurista o escenario distante de tramas reservadas a las grandes potencias del primer mundo, de manera alguna es extraño al aquí y ahora electoral doméstico.
En las últimas semanas, variadas fuentes de difusión han insistido en el “inflado” posicionamiento del movimiento “morenista”, aludiendo a presuntas manipulaciones cibernéticas para hacerlo aparecer con ventajas extraordinarias a su candidato presidencial y compañeros de fórmula.
Independientemente del nivel de aparejamiento entre lo que reportan las encuestas y las reales simpatías que acompañan a ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR y su movimiento, la sola proyección de ventajas genera inercias entre algún sector poblacional cuya vocación es “ir con los ganadores”.
Dígalo si no el hecho de tantos militantes de otras corrientes político-partidistas que antes de agotar la posibilidad de sacar una nominación en sus institutos político, fueron a tocar puertas al peje-partido y otros tantos, que agotadas sus aspiraciones en el partido de sus tradiciones pronto fueron a alinearse con aquel.
Candidatos y ciudadanos han andado esa ruta.
No obstante, la pretendida participación “avasallante” del “pejepartido”, no se reflejó en el cierre de campaña estatal dado el pasado fin de semana en la capital tamaulipeca, al que esperaban 10 mil simpatizantes y no llegó la mitad de ellos.
Entre la audiencia, por añadidura, permeó el origen de varios de los neomorenistas, quienes llegaron con grupos de turistas electorales en autobuses expresamente rentados, llenos de convidados con gastos pagados y operadores remunerados.
Los cierres de campaña están convertidos en la penúltima carta que se juegan los actores políticos en la contienda, mismos que algunos pretenden coronar en el Día D, con una estrategia como la que la GSPM define como “no siempre dentro de un marco ético y mucho menos legal”.
Al PEJE ya lo vimos despedirse de Tamaulipas en las instalaciones del Recinto Ferial Estatal el viernes; toca turno, mañana, en la víspera del cierre de toda actividad proselitista en el país, al abanderado presidencial panista, RICARDO ANAYA CORTEZ.
Estará primero en El Mante, pero el evento estatal mayor está convocado para el Estadio Marte E. Gómez, en Victoria capital, a partir de las 17:00 horas; por el recinto, se prevé esperan a más de 10 mil concurrentes; veremos y diremos.
Por tratarse del último fin de semana destinado para el proselitismo, antes de las votaciones a darse el siguiente domingo, desde estos días previos algunos candidatos a nivel local empezaron a hacer cierres de campaña.