Héctor Astudillo honra legado y obra de Vicente Guerrero en aniversario Luctuoso

“A Oaxaca y Guerrero nos une la geografía, la historia y la cultura; también los desafíos de la pobreza y el atraso y nuestros pueblos han sobrevivido a las peores calamidades de las que puedan ser víctimas los seres humanos, señaló el gobernador Héctor Astudillo Flores al acudir a este lugar, donde en 1831 falleció el general Vicente Guerrero.

Como parte de la ceremonia oficial, ambos mandatarios, junto representantes de los poderes legislativo y judicial de Guerrero y Oaxaca, develaron un monumento y las placas conmemorativas del General Vicente Guerrero donado por el gobierno del estado de Guerrero.

En este histórico lugar y ante el gobernador de esta entidad, Alejandro Murat Hinojosa, Astudillo hizo una reseña de la vida y obra del consumador de la Independencia, de quien dijo, que su generosidad con la patria no tuvo límites y fue de la estirpe de los grandes libertadores de América, por lo que “debemos recordarlo en su egregia figura como lo que fue, el heredero legítimo de Hidalgo y Morelos”.

En su mensaje, lleno de datos históricos y de un alto contenido político, Astudillo Flores indicó que sobran motivos de gratitud con el pueblo de Cuilapam, y en ese marco, pueblo y gobierno de Guerrero conceden a esta ciudad la estatua de Vicente Guerrero, obra del escultor Miguel Ángel Rivero, en la que muestra su decidido arrojo.

Recordó que durante la década de 1775 a 1783 fue prédica para al nacimiento de una notable generación de libertadores, entre ellos Antonio José Francisco de Sucre, en 1775; Bernardo O’higgins y José de San Martín, en 1778; Vicente Guerrero, en 1782, y Simón Bolívar nacido en 1783, que romperían las cadenas del oprobio en Venezuela, Colombia, Argentina, Perú, Bolivia, Chile y México.

Asimismo, en nombre de las y los guerrerenses, así como del gobierno de Guerrero, agradeció al gobierno de Oaxaca, a los poderes Legislativo y Judicial y al ayuntamiento municipal de Cuilapam de Guerrero, su disposición y colaboración para conmemorar conjuntamente al caudillo suriano, el general Vicente Guerrero.

Por su parte, el gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat Hinojosa, destacó que Vicente Guerrero no fue sólo el de las hazañas en el campo de batalla, sino que fue y sigue siendo el símbolo de la unidad nacional y de la defensa de la soberanía por lo que, en 1833, fue declarado por Decreto, Benemérito de la Patria.

Agregó que en 1849 se creó, en su honor el estado hermano de Guerrero, y hoy, a casi dos siglos de distancia, nos une algo más que la vecindad geográfica.

«Hoy nos une Vicente Guerrero, nos une su ideal de un destino común; nos une la visión que tuvo de México, como un pueblo libre e independiente y nos une su definición del gobierno como mandato único y legítimo del pueblo, así como su vocación de servicio y su tesón para convertir las bellas palabras en buenas acciones».

Por último, el mandatario oaxaqueño señaló que hoy Oaxaca y Guerrero se abrazan nuevamente en torno al monumento que, con gusto y agradecidamente, “recibimos del pueblo de Guerrero y de las manos de su gobernador”. El destino, dijo, llevó al broncíneo general a Tixtla, y la historia lo trajo a Cuilapam. Allá y aquí vive su grandeza. Aquí y allá pervive.

Posteriormente Astudillo y Murat montaron una guardia de honor con una ofrenda floral en honor al insurgente guerrerense, y realizaron un recorrido por el ex convento de Cuilapam de Guerrero, realizaron la firma del libro de visitantes distinguidos.

En esta ceremonia, se contó con la presencia del presidente de este municipio, Diego Moisés Pérez de la Cruz; el presidente de la Mesa Directiva del Congreso de Oaxaca, Jorge Octavio Villacaña Jiménez y el presidente del Tribunal Superior de Justicia, Eduardo Pinacho Sánchez. Por Guerrero asistieron el presidente del Tribunal Superior de Justicia Alberto López Célis; el presidente de la mesa directiva del Congreso local, Alberto Catalán Bastida, y la alcaldesa de Tixtla, Erika Alcaraz Sosa, entre otros.

Agencias