Google podría ofrecer servicios bancarios en 2020

Google está en conversaciones con bancos de Estados Unidos (EU) para ofrecer cuentas bancarias a sus clientes, acelerando la incursión de Silicon Valley en los servicios financieros después del lanzamiento de la tarjeta de crédito de Apple y de Libra, la moneda de Facebook.

El movimiento de Google podría alarmar más a los legisladores, que ya están preocupados por la concentración cada vez mayor de información personal dentro de unas cuantas compañías de tecnología. Después de que Facebook se topó con una resistencia generalizada a Libra, Google dijo que quiere “asociarse profundamente” con proveedores de servicios financieros actuales.

Muchos reguladores en EU y Europa creen que la táctica de Google de formar paquetes para nuevos productos con servicios de uso generalizado, como su motor de búsqueda y el software Android para smartphones, es anticompetitivo.

La Comisión Europea recaudó miles de millones de dólares en multas antimonopolio contra Google en los últimos años, después de investigaciones sobre sus negocios de búsquedas, publicidad y Android.

Las últimas incursiones de Google en los servicios financieros se producen cuando Alphabet, su matriz, avanza en la atención de la salud, con una nueva alianza de computación en la nube con el proveedor estadounidense Ascension y la adquisición que tiene planeada de Fitbit, el pionero de los monitores de condición física.

Si bien los pagos móviles y en línea, como WeChat Pay y Alipay, ya se utilizan ampliamente en China, hasta el momento los avances de las compañías de Silicon Valley han sido más lentos en el mundo altamente regulado de los servicios financieros.

A principios de este año, Apple y Goldman Sachs se asociaron para lanzar una tarjeta de crédito, ofreciendo reembolso en efectivo en las compras de dispositivos Apple y una aplicación para iPhone que permite darle seguimiento a los gastos.

Los challenger banks europeos (plataformas 100% digitales que ofrecen servicios financieros y operan únicamente en línea) como Revolut, N26 y Monzo, han recaudado cientos de millones de dólares para atraer a los clientes y alejarlos de las instituciones financieras tradicionales, al ofrecer aplicaciones y servicios que a menudo son más baratos o más fáciles de usar que los de sus competidores.

Por su parte, los grupos de comercio electrónico en Estados Unidos, entre ellos PayPal y Square, ofrecen tarjetas de débito a determinados clientes.

El nuevo esfuerzo bancario de Google, con el nombre código Cache, es el último intento de la empresa de 900,000 millones de dólares (mdd) para ingresar a la industria de las finanzas personales.

Primero presentó Google Wallet, en 2011, como una forma para que los usuarios se envíen dinero entre sí. Pero no ganó atracción en el mercado hasta la introducción de Google Pay, que al igual que su principal rival, Apple Pay, permite que se utilicen los smartphones para pagar compras en línea y fuera de línea.

Google Pay tiene decenas de millones de usuarios en todo el mundo y es particularmente popular en India.

En diciembre pasado, Google obtuvo una licencia de dinero electrónico (emoney) en Lituania, que le permite procesar pagos y ofrecer monederos digitales en toda la Unión Europea.

Asimismo, consiguió una autorización del banco central de Irlanda en virtud de la segunda Directiva de Servicios de Pago. “Nuestro enfoque será asociarnos de manera profunda con los bancos y el sistema financiero”, dijo Caesar Sengupta, gerente general de pagos de Google, en una entrevista con el Wall Street Journal.

El diario también informó que Google está en conversaciones con bancos, entre ellos Citigroup, para ofrecer cuentas bancarias en 2020.

Agencias.