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El aguinaldo que viene

12/12/2018 – Es mediados de la semana, Día de la Virgen de Guadalupe y por tanto, de festividad en todas las regiones del país. En unas más que otras, pero, pachanga al fin porque el pueblo de México es guadalupano y se adentra en la celebración religiosa con mucha determinación, por su alta credibilidad en la Virgen del Tepeyac.
Además estamos en el Día del Empleado Bancario, motivo por el cual no hay actividad en bancos y, en previsión todas las personas debieron de hacer los movimientos naturales para sus empresas o en lo personal, este martes 11 de diciembre o de plano posponerlas para el jueves 13.
Tiene una connotación más, referente al inicio del pago de los aguinaldos, que las empresas o instituciones otorgan a sus trabajadores como un reconocimiento a la dedicación que tuvieron a lo largo del año en la chamba que les toca hacer más la obtención de las metas trazadas desde las direcciones.
En el caso del aguinaldo, es considerado como un ingreso adicional al salario, que se obtiene por el aporte al desarrollo de las empresas y del tiempo de trabajar en ellas, además, por ley, tiene que ser entregado antes del 20 de diciembre, es decir, queda una semana para que todo mundo se haya echado a la bolsa ese extra al que se apuesta casi todo en el fin de año y las pachangas que implica.
Nos referimos a las posadas, la cena de Nochebuena, el disfrute del Día de la Navidad que es el 25 de diciembre, aquello que se invierte para mejorar las condiciones del hogar durante los días de inactividad como consecuencia de las vacaciones, las actividades de fin de año y el arranque del que viene, con el mismo vuelo del aguinaldo, ya que, en lo general las empresas y las instituciones vuelven a pagar a sus trabajadores hasta la segunda semana del mes de enero.
Según la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros, CONDUSEF, el 43 por ciento de los trabajadores mexicanos que perciben aguinaldo, lo destinará a la compra de regalos, el 24 por ciento para la preparación de cena navideña y el 32 por ciento lo ahorrará.
Para aprovechar el aguinaldo, es necesario hacerse pensar en la situación financiara actual y de esa forma decidir qué se hará con el ingreso extra. Obvio, entre las acciones recomendadas está la compra de regalos, la liquidación de deudas adquiridas durante el año o ahorrarlo con fines de metas previstas para el año venidero.
Si hubiese incertidumbre respecto a qué hacer con el aguinaldo, hay plataformas en internet dedicadas a asesorar mediante propuestas y recomendaciones para las personas, el mejor uso de ese dinero.
Sobresalen cuatro cosas en las que vale la pena invertir una parte del aguinaldo, darse un gusto personal, pero, razonable, esto es, comprarse algo porque se trata del momento para recompensar el trabajo de todo el año, siempre y cuando se pueda costear, que no rebase el presupuesto o que, la deuda adquirida sea manejable.
Lo otro es pagar deudas, acción considerada como la mejor opción, porque de esa manera se inicia el año con nuevos bríos y se evitan cargas financieras que le pegan a lo anímico de las personas.
También con el aguinaldo en la mano se puede ahorrar todo o invertirlo, bajo la premisa de que, ambas cosas se hacen sin la necesidad de grandes capitales.
Otra cosa es que se aprovechen los recursos para hacer aportaciones al Afore, una decisión adecuada siempre y cuando no haya deudas que pagar o regalos que comprar, incluso, debe de evitarse pensar en cosas a corto plazo y no echar mano del dinero a la de ya, más bien tiene que ser una planeación correcta para evitar malas decisiones, paso adecuado para tener bien claro a dónde fue a parar el aguinaldo y que, lo resuelto con ese dinero genere satisfacción y haga felices a las personas.
Esto último, porque la parte psicológica es canija, ya que, al no invertir en forma adecuada ese recurso extra que los trabajadores tienen de entre el 10 y el 20 de diciembre, puede ocasionar malestar y derivar en depresiones de cualquier nivel, de ahí la importancia de hacer aquello que dé felicidad a los trabajadores y sus familias.
La Ley Federal del Trabajo establece en su Artículo 87 que, en México el monto mínimo del aguinaldo es el equivalente a 15 días de salario y a 40 días en el caso de los trabajadores estatales, mismo que debe de pagarse antes del 20 de diciembre de cada año.