GACETA

Raúl Terrazas Barraza

21/05/2017

El frente opositor que viene

Los presidentes nacionales del PRD y el PAN, Alejandra Barrales Magdaleno y Ricardo Anaya Cortés, llamaron a las fuerzas políticas representadas por los partidos, para que se forme un frente amplio opositor, para derrotar al PRI en las elecciones presidenciales del 2018.
Los dos personajes de la política nacional, anunciaron de manera conjunta, en una charla con representantes de medios de comunicación, que sus partidos ya definieron conformar el frente opositor, bajo la premisa de que las coaliciones que llevaron a cabo fueron exitosas.
Ambos consideraron que un frente de esas características es el mejor camino para lograr la transformación de México, por tanto, dejaron abierta la puerta al alineamiento de partidos y cuando llegue el momento dentro del proceso electoral federal, se establecerán los registros y compromisos que cada quien tendrá para lograr el objetivo trazado.
Por cierto, Barrales Magdaleno y Anaya Cortés, dejaron en claro que los acuerdos para el 2018, no tienen nada que ver en las elecciones locales del Estado de México, en las que cada quién participa por su cuenta. Ni el PRD ni el PAN declinarán uno a favor del otro en el proceso eleccionario de la tierra del presidente de la República, Enrique Peña Nieto.
En cuanto el acuerdo se hizo público, no faltó quien considerara se pone en marcha una estrategia que en el pasado sólo una frase, Todos contra el PRI, desde el momento que un frente opositor conjugará muchas fuerzas, que ellos esperan sean suficientes para que haya de nuevo alternancia en la Presidencia de la República.
De inicio, lo fundamental es el impacto político de la declaración conjunta que hicieron los dirigentes de los dos partidos políticos nacionales, sin embargo, en el terreno de los hechos, las cosas son demasiado duras, porque hay entidades como Tamaulipas, donde el PRD está desarticulado, desorganizado y con muy escasa gestión de votos como para ser el primer aliado en el frente opositor.
Es más, el dirigente del PRD, profesor Alberto Sánchez Neri, anda muy ocupado en la defensa de su honor y de su chamba en la Secretaría de Educación del Estado, de la cual quiere ser despedido por el ex priísta Mario Leal Rodríguez.
Así que, será muy poco en lo que pueda contribuir al asunto del frente opositor, porque primero lavará su honor ante las calumnias que le fueron levantadas y después verá como le hace para llevarle las contras al PRI en el proceso de elecciones presidencial del 2018.
Como partidos políticos, quizá puedan anotarse al alineamiento contra el PRI, el Partido del Trabajo y el Partido Encuentro Social.
En veremos quedan los partidos Verde Ecologista de México y el Partido Nueva Alianza, este último el de los maestros que seguro podría jugársela en el frente opositor como una forma de vengar todo lo acontecido a la maestra Elba Gordillo Morales, que fue la creadora de esa organización, en ocasión de la ruptura que tuvo con el PRI en la época de Roberto Madrazo Pintado y como medida para que el magisterio estuviese siempre representado en el Congreso de la Unión, Congresos de los Estados y los Ayuntamientos.
Respecto al caso del Verde Ecologista es probable que le den una pensada, porque en el año dos mil tuvieron una mala experiencia, ya que se coaligaron para que Vicente Fox Quesada llegar a Los Pinos y, cuando estuvo allí, de los primeros que se deshizo fue de los que trabajaron con él.
Basta recordar que Jorge González Torres, quien era el dirigente nacional del PVEM, tuvo un pleito de grandes dimensiones con el equipo foxista y desde entonces, el partido que ahora maneja su hijo, Jorge Emilio González Martínez y cuyos resultados políticos desde entonces, son mejores, obvio, él es ganón de todo, porque, así como ha sido senador, también la ha hecho de diputado federal y es quien está detrás de las decisiones que se toman en la dirigencia nacional.
Otros que no le entrarían al frente opositor amplio, son el Partido Movimiento Ciudadano, el dirigente Dante Delgado Rannauro, tiene otro tipo de planes, como confeccionar un listado plurinominal para las Cámaras del Congreso de la Unión de primer nivel y de esa forma dar la pelea política a las otras fuerzas nacionales, en el sexenio que viene.
Además, tiene aliados como el diputado matamorense avecindado en Victoria, Adolfo Cárdenas Gutiérrez, que producen votos suficientes para generar cargos plurinominales, incluso, hasta podrían obtener triunfos en algunos municipios del país.
Los que, en definitiva, ni oirán el llamado del PAN y del PRD, para eso de un frente opositor, son Andrés López Obrador, dueño del Partido Movimiento de Regeneración Nacional y sus seguidores, porque ellos son la oposición verdadera en este país, de manera que nadie podrá quitarles esa condición, menos un frente ocasional que podría ser más mediático que operativo para las elecciones presidenciales del 2018.
Bajo esta perspectiva, hablamos de que podría ser un grupo de partidos unidos contra el PRI, que no va más allá de los tres o cuatro, a lo mejor cinco, siempre y cuando Nueva Alianza decida dejar a los priístas, con quienes, al igual que el Partido Verde Ecologista ha logrado resultados satisfactorios.
Obvio, no podemos dejar de lado el hecho de que el ex candidato presidencial de Nueva Alianza, Gabriel Quadri de la Torre, le ha seguido de frente con su postura de lucha contra todos los partidos políticos que sacaron más votos que él en las elecciones del 2012, es más, hasta tiene la intención de repetir como candidato para la elección del 2018.
Respecto al Partido del Trabajo, lo que aportaría al frente opositor, será su membrete, porque también tiene graves problemas de desintegración a consecuencia de la escasa votación que tuvo en las elecciones federales del 2015, cuando no llegó al porcentaje que exige la ley para la conservación del registro, pero, le han seguido de frente, como si no lo hubiesen perdido.
En Tamaulipas como en muchas entidades del país, el PT no será un factor opositor del tamaño que quieren Barrales Magdaleno y Anaya Cortés.