Familias se abrazan en la ‘puerta de la esperanza’ en la frontera con EU

24/11/2016 – La puerta del muro fronterizo entre México y Estados Unidos fue abierta por 20 minutos en la línea divisora de Playas de Tijuana para que seis familias separadas por leyes de países se volvieran a encontrar.

Socorro Martínez viajó desde puebla a Tijuana para ver a su hija por tres minutos, lo cual le dio a su vida una enorme alegría porque anhelaba abrazarla desde hace 18 años cuando ella fue deportada de Estados Unidos a México.

Mencionó que, a sus casi 70 años, el poder ver y abrazar a su hija, es una satisfacción que no tiene precio, porque no hay dinero que pueda pagar esa alegría después de tanto sufrimiento y espera.

Comentó que viajó pensando que iba a ver a su hija y nietos de Estados Unidos a través de las rejas del muro y le dieron la sorpresa que no sólo los vio, sino que también los pudo abrazar y así aprovechar cada segundo que tuvo para permanecer unida a ellos.

Por otro lado, Laura Martínez, residente de Estados Unidos, mencionó que estaba muy nerviosa y contenta porque su mamá le dio el anhelado abrazo que esperaba desde hace muchos años.

Explicó que nació en la ciudad de Puebla pero no piensa regresar a vivir a México, porque no se hallaría a vivir nuevamente en nuestro país, ya que sus hijos de 17, 11 y tres años estudian en Estados Unidos.

Socorro Martínez manifestó que sintió “muy feo” separarse de su hija y que siempre es doloroso estar lejos de sus nietos; considera que no deberían de existir los muros porque causa mucho dolor la separación.

Expresó que cuando el gobierno regresa a las personas de Estados Unidos a México debería de ser a las familias completas, no separar a las madres de los hijos porque la vida de una madre sin sus hijos es muy triste.

Comentó que las mamás con el tiempo pierden hasta la esperanza de ver y abrazar a sus hijos, y opinó que los presidentes de Estados Unidos deberían de ponerse en el lugar de las madres que trabajan mucho por muy poco dinero y a pesar de eso las alejan de sus hijos.

La unión familiar que existe entre las familias fue presenciada por autoridades, prensa y familias de México y Estados Unidos, todos sensibles por el impactante acontecimiento.

Las familias permanecieron juntas en los límites del muro fronterizo en Tijuana; aún con la puerta abierta ninguna de las personas podía avanzar más adelante de ese límite.

El emotivo evento fue organizado por Ángeles de la Frontera, Border Angels; y el Departamento de Seguridad Nacional, mismos que de una forma humana honraron El Día Mundial de la Infancia, donde la valla metálica permitió a los infantes ver a sus familias.

Aunque fueron pocos instantes, niños y abuelitos pudieron jugar juntos; del lado de México, el abuelito trataba de abrazar a su nieto que permanecía en Estados Unidos y el niño a su vez, tomaba un puño de tierra y se la entregaba a su abuelito.

Por cuarta ocasión se abrió la denominada “Puerta de la Esperanza” para que seis familias traspasaran las barreras de la frontera más transitada del mundo, comprobando que los muros no deben de existir porque separan a las familias, a pesar que el amor no es ilegal.

La puerta en el Muro del Faro de Playas de Tijuana testificó la alegría de los niños, jóvenes y adultos que se vieron y abrazaron después de tantos años, así como de las lágrimas y tristeza que reflejaban sus rostros al tener que separarse nuevamente.

Agencias