Extorsiones en puente forzan a inmigrantes a cruzar el río Bravo

A los migrantes que llegan a la ciudad de Matamoros para solicitar asilo político en los Estados Unidos se les cobra una cuota en el Puente Internacional Puerta México (Nuevo) en donde opera el Instituto Nacional de Migración (INM) -dependencia federal que maneja la lista de los solicitantes de refugio-, reveló ayer el Coordinador Diocesano de la Pastoral Social y Migratoria en Matamoros, presbítero Francisco Gallardo López, durante un foro en materia migratoria en el Colegio de la Frontera Norte (COLEF).

Ante especialistas, investigadores y expertos en el tema migratorio, denunció que la joven familia proveniente de la zona de Altavista, al sur de El Salvador, que llegó al Puente Nuevo Internacional de Matamoros -y en la que murieron ahogados en el río Bravo dos de sus tres integrantes, el joven de 21 años de edad Oscar Alberto Martínez Ramírez y su hija Angie Valeria Martínez Ávalos, de solo 23 meses- no tenía dinero para pagar la cuota que se les exige a los migrantes en ese cruce fronterizo, por lo que optaron por nadar para cruzar por el río para no tener que esperar tanto tiempo para una cita de asilo.

“No pudieron pagar la corrupción en el puente”
¿Por qué se ahogó este jovencito y su hija? «porque no pudieron pagar todavía la corrupción en el Puente Nuevo Internacional Puerta México», precisó Gallardo López, quien destacó que como responsable de informar sobre la situación migratoria en esta ciudad, “tengo que decir lo que es, esta situación sucede y yo no puedo perder mi credibilidad”.
Recalcó también que, «¿por qué ocurre la muerte de algunos migrantes que se van por el río Bravo que quieren cruzar?, es precisamente porque a veces no tienen la cuota que alguien en los puentes les pide para poder ingresarlos o para poder dar alguna situación de ingreso a Estados Unidos; entonces, hay mucha gente, sobretodo los centroamericanos, ellos lo comentan, yo lo que digo es la palabra de ellos, no tienen dinero para pagar, entonces optan por lanzarse al río y eso conlleva a una situación gravísima».
La cantidad de migrantes que permanecen por el momento en Matamoros para pasar a la entrevista de asilo -y que todos los días acuden al Puente Nuevo- son entre 800 y 1,000 extranjeros, de acuerdo al conteo y cálculo que tiene la Pastoral de Movilidad Humana, de los cuales muchos tienen meses en espera de pasar a su cita.

Llegan, los apuntan y pasan primero
Una migrante proveniente de Honduras (no se especifica su nombre, para su protección) quien tiene casi dos meses en esta ciudad apuntada en la lista para pasar a su cita de solicitud de asilo, denunció ante este medio informativo que con frecuencia algunos extranjeros que llegaron después de ellos se apuntan en la lista con personal del INM en el Puente Puerta México y ya pasaron a su cita en EE.UU.

Alista Iglesia amparos
para evitar detenciones
El también encargado de la Casa del Migrante de la Diócesis de Matamoros que ante la advertencia del gobierno federal de castigar con penalidades que ascienden hasta 25 años de cárcel por auxiliar a migrantes -lo cual lo reveló EL BRAVO el sábado- dijo que los grupos de ayuda a migrantes de la Iglesia Católica ya están por ampararse para evitar detenciones arbitrarias por parte de personal de las autoridades federales -como el INM- por ayudar a extranjeros.
“Como pertenecemos a colectivos de defensores de derechos humanos estamos viendo esa situación de cómo nos amparamos, porque eso es necesario, ya tenemos ahorita avanzado de cómo nos vamos a amparar”, dijo el Coordinador Diocesano de la Pastoral Social y Migratoria en Matamoros.
El presbítero también reveló que existe la amenaza de que autoridades federales, ante la presión por controlar el flujo migratorio, les cierren las Casas del Migrante y albergues en Matamoros -así como en las ciudades de la frontera norte de México- en donde se les da hospedaje, alimentación y asistencia a los migrantes.
“Si cierran las casas ya somos expertos en abrir otro tipo de albergues”, dijo Gallardo López, al referir que buscarían la forma de no suspender la ayuda a los extranjeros que vienen a solicitar asilo, así como aquellos que llegan deportados, como también a los que arriban con la intención de cruzar de manera ilegal a los EE.UU.

No serán cómplices, advierte presbítero
Sobre si se sienten perseguidos por las autoridades de gobierno federales y de migración, aseguró que hasta ahora todavía no y con ellas -comentó- tienen diálogos de colaboración en materia de migración.
Aunque aclaró y advirtió que, “el que tengamos estos diálogos no significa que nos volvamos cómplices de situaciones, de ningún modo”.