En Concreto

Mafia del Poder, al PRI

18/07/2018 – Casi un cuarto de siglo después del proditorio asesinato del ex secretario general del CEN del PRI, JOSÉ FRANCISCO RUIZ MASSIEU -ocurrido el 28 de septiembre de 1994, a unas cuadras del Monumento a la Revolución-, su hija CLAUDIA RUIZ MASSIEU asumió por prelación el liderazgo partidista, en lo que parece un primer paso hacia la toma del poder tricolor por el ex presidente CARLOS SALINAS DE GORTARI, identificado públicamente por ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR como uno de los jefes de la “Mafia del Poder” PRIAN.
[-El otro sería FELIPE CALDERÓN HINOJOSA o DIEGO FERNÁNDEZ DE CEVALLOS-].
Pero, ¿para quién «pavimenta» RUIZ MASSIEU el camino hacia el liderazgo partidista, habida cuenta de que la “refundación” del PRI supone un cambio radical de estrategia para asumirse como verdadera oposición bajo el gobierno izquierdista de AMLO?
Es un misterio, pero CLAUDIA siguió [respetando puntos, comas, diéresis, puntos suspensivos y signos de admiración], la agenda marcada tras su renuncia por el ex presidente RUBÉN JUÁREZ CISNEROS, quien luego de ejercer una severa autocrítica que hundió sus raíces en el movimiento estudiantil de 1968 -y pidió “aprender la lección de la elección”-, marcó la pauta a seguir al anunciar la integración de una comisión que tendrá a su cargo la refundación del PRI.
¿Hacia dónde se inclinará El-Gran-Dedo-Elector, cuando el PRI se «pulveriza» y no parece que ENRIQUE PEÑA NIETO tenga capital político para «enderezar el barco», y el influyente apellido SALINAS suena, y suena fuerte?
¿Qué anuncia la instalación de RUBÉN MOREIRA como secretario general del Comité Ejecutivo Nacional?
¿Puede esperarse un cambio en la “refundación” del PRI, cuando quienes lo instrumenten sean los mismos de siempre, como ocurrió la víspera cuando se habló del Nuevo-PRI?
Que nadie se engañe:
La toma del timón partidista por CARLOS SALINAS DE GORTARI parece marcar otra fase en el enfrentamiento histórico CSG-AMLO, de modo que bajo esa percepción debe esperarse que el sucesor de JUÁREZ CISNEROS en el liderazgo nacional del PRI, sea un salinista de pies a cabeza.
Es decir, CSG hará ahora el papel que hizo AMLO con los gobiernos priístas desde una perspectiva de oposición, de modo que lo que puede esperarse es un PRI crítico, analítico, proactivo y muy participativo, por lo que el próximo liderazgo priísta debe tener soporte científico y académico, para que sus críticas al gobierno obradorista se conviertan en disparos de precisión que produzcan rentabilidad política futurista.

¿Y TAMAULIPAS?
Si detrás de la “refundación” del PRI está CARLOS SALINAS DE GORTARI, ¿quién «replicará» en Tamaulipas la estrategia de “refundar el Partido Revolucionario Institucional»?
¿MANUEL CAVAZOS LERMA -es decir los seguidores de su doctrina; ¿su hijo MIGUEL?-, caracterizado como uno de los salinistas más ortodoxos de su época; ¿OSCAR LUEBBERT, un colosista-salinista a carta cabal?, ¿EDGAR MELHEM?
El panorama luce incierto máxime que la tarea que viene es titánica, habida cuenta de que el PRI -es decir, lo que dejó del PRI el desgobierno egidista-, perdió todo, desde las candidaturas, hasta la unidad que alguna vez tuvo.
¿Quién convocará aquí a la “refundación”, ya anunciada para la segunda semana de julio?
Los “cavacistas” de cepa, dispersos en la geografía tamaulipeca pero particularmente en Matamoros, están por saltar al liderazgo partidista:
Esté usted pendiente.

GOBERNADORES “LLEVAN MANO”
Lo que sucede al interior del PAN no es asunto menor, pero en Acción Nacional los gobernadores de esa extracción “llevan mano” en las decisiones, máxime quienes en plena campaña electoral percibieron que su candidato No-Ganaría-La-Presidencia de la República y marcaron un claro “deslinde”.
En esa circunstancia están los mandatarios que integraron la Asociación de Gobernadores del PAN, liderada por los Ejecutivos de Durango, Querétaro, Tamaulipas, Aguascalientes, Baja California Sur, Puebla y Quintana Roo, quienes hoy proponen que el PAN tenga un líder que tenga interlocución con los diferentes grupos dentro del partido.
Los 7 Gobernadores y más de 30 panistas de diferentes estados del país, en su mayoría diputados y ex diputados federales, expresaron su rechazo hacia el trabajo de RICARDO ANAYA y DAMIÁN ZEPEDA y exigieron su renuncia.
En su propuesta, los gobernadores plantearon que es necesario refundar al PAN, y rechazan que luego de perder la elección, RICARDO ANAYA regrese a dirigir al partido.
El gobernador de Durango, JOSÉ ROSAS AISPURO, advirtió que tanto ANAYA como DAMIÁN ZEPEDA, presidente nacional del PAN, resienten un “natural desgaste”.
“Lo saludable es encontrar a alguien que pueda sumar a todos, que pueda dialogar con todos”, expresó.