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28/08/18.- El Congreso de Tamaulipas es de los que más gastan en nómina, de acuerdo con una evaluación del IMCO que señala que la Legislatura local destina 75% de su presupuesto en el pago de sueldos y el costo por diputado es de 4.3 millones de pesos.
El año pasado, la Legislatura destinó 75% de su egreso anual al rubro de servicios personales (sueldos), 20% del presupuesto se fue a servicios generales, 3% a materiales y suministros y 1 por ciento se ocupó en “otros gastos”.
Al aplicar tres de cada cuatro pesos para cubrir la nómina, el Congreso estatal solo fue superado por Jalisco, el cual ocupa un 94 por ciento en este rubro y San Luis Potosí que a su vez canaliza el 77%.
El Congreso local fue también de los que gastaron más de lo presupuestado (20%+) en su ejercicio fiscal, ubicándose en un tercer lugar en este indicador después de Oaxaca (86%) e Hidalgo (30%).
El Instituto Mexicano para la Competitividad advierte que a menos que exista un fenómeno extraordinario que comprometa el cumplimiento de sus metas, los Congresos locales no deberían gastar más de lo que se aprueban.
En 2018, el Poder Legislativo del estado dispone de recursos por 156 millones 681 mil 822 pesos y el presupuesto por diputado es de 4 millones 352 mil 273 pesos.
El costo por habitante, detalla el IMCO, es de 43 pesos. La LXIII Legislatura tamaulipeca cuenta con un total de 36 diputados locales, de los que 56 por ciento son hombres y 44% mujeres.
En el periodo 2016-2019, hay 101 mil 699 habitantes por diputado local. El promedio nacional es de 100 mil 708.
Del total de los legisladores, veinte corresponden al Partido Acción Nacional, once al PRI, dos a Nueva Alianza, uno a Movimiento Ciudadano, uno a Morena y uno más es independiente.
La Auditoría Superior del Congreso del Estado tiene a su vez un presupuesto de 81 millones 405 mil 699 pesos. También se indica que hay 255 trabajadores en el Congreso tamaulipeco.
Por otra parte, el análisis del IMCO menciona que hay ocho Congresos locales que no cuentan con servicio profesional de carrera en su legislación; Tamaulipas es uno de ellos. Además, el diagnóstico de Parlamento Abierto 2017 para Tamaulipas fue evaluado como “insatisfactorio”.
El Instituto señala que las Legislaturas realizan las mismas funciones, sin embargo, las disparidades en el presupuesto y gastos son relevantes. Esto significa que hay margen para hacer lo mismo con menos recursos financieros y sin comprometer el logro de sus metas.
“Mala planeación del gasto. Los diputados locales se asignan un presupuesto cuyo monto original varía significativamente en algunos Congresos lo que, a menos que ocurra una situación extraordinaria, no tiene justificación pues el trabajo parlamentario sigue siendo el mismo en un ejercicio fiscal”, se lee en su estudio.
Subraya que a pesar de su importancia, los Congresos locales pocas veces son estudiados y llamados a rendir cuentas.
Agencias
