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2/11/2018 – El Paso/Agencias.- La tensión provocada por el cruce de miles de aspirantes al asilo político en Estados Unidos no conoce, literalmente, fronteras. Es una nueva angustia, producto de la globalización.
Apoyados
Apoyados en la tecnología, los medios de comunicación narran de manera casi inmediata la crisis migratoria que se vive en los cruces internacionales de esta región. Imágenes de la versión electrónica de diversos medios locales, dieron cuenta de la llegada de una profesionista cubana al puente Paso del Norte en su intento por adentrarse en EU. Pero también exhibe la angustia que viven los familiares al perderle el rastro. Tal es el caso de Aini, una joven originaria de Cuba quien en su desesperación por dar con su madre, se comunicó con la redacción un diario en la localidad.
Nota
En la nota publicada el martes en Diario Digital alrededor de las 11:55 p.m. se dio a conocer que el gobierno estadounidense permitió la entrada a seis inmigrantes que estaban a la espera de respuesta para ser entrevistados por “miedo creíble”: el requisito para solicitar asilo político en este país. “¡Ahí, ahí, en ese video!, casi al último es en donde vi a mi mami, parece que vi la luz otra vez”, expresó Aini mediante una llamada telefónica desde Jacksonville, Florida, donde ahora reside. “¡Es ella!, trae un abrigo rojo y una bolsa azul de tela”.
Nuevas políticas
De acuerdo con la mujer, su madre tenía al menos tres días acampando en el puente en espera de respuesta de oficiales de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP). Bajo las nuevas políticas, autoridades federales reciben a un número limitado de solicitantes de asilo en las garitas. El resto tiene que esperar -a veces días enteros- en la mitad de los puentes internacionales en Juárez, donde padecen los estragos de las temperaturas extremas y enfrentan hambre, pese a que la comunidad fronteriza ha mostrado su solidaridad llevándoles alimentos, agua y cobijas.
Agradecimiento
Con 60 años y nada de pertenencias más que lo que lleva puesto es como la mamá de Aini, identificada únicamente como «Deysi», dejó Cuba para reencontrarse con su hija y su nieta en el país norteamericano. “Mi mamá es una periodista independiente en Cuba, bajo amenazas insoportables, presiones y cosas que uno jamás se imaginaría logró salir del país con una visa de turista alegando que iría a Cancún de vacaciones, pero la realidad es venirse conmigo”, declaró Aini. Entre lágrimas, Aini dijo estar sumamente agradecida con los juarenses por la solidaridad que han mostrado a los migrantes en su estadía en medio del frío, la lluvia y la espera, misma que, según la cubana, es cada día más angustiante. A mediodía de ayer se logró corroborar que la madre de Aini se encontraba aún en medio del puente internacional Santa Fe, a espera del ingreso de Aduanas y Protección Fronteriza. Aunque se le invitó a emitir algunos comentarios, optó sólo por agradecer la atención de la comunidad fronteriza.
