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14/10/2016 – Pocos son los resultados que aseguran representantes de la Iniciativa Privada se han visto con respecto al combate contra la delincuencia y la reducción de inseguridad, escenario que lleva más de 10 años sin poder contenerse, lo cual ahora pone a los corporativos, tanto pequeños, como grandes, en una situación compleja al verse amenazados a quebrar por el excesivo gasto que hacen para el resguardo de sus bienes.
Marco Antonio Farías, asesor de desarrollo de empresas en Matamoros, asegura que las empresas que consultan en un 70 por ciento se encuentran en problemas financieros por dos aspectos: el pago de impuestos y el desembolso hecho por la inseguridad, situación de la que advierte esto podría traer la quiebra de muchas empresas antes de finalizar el año.
Asegura que entre 7 y 8 años una gran cantidad de negocios decidieron contratar servicio y equipo de seguridad para el resguardo de sus mercancías, instalaciones y personal, lo que elevó de manera considerable su gasto operativo en algunos casos hasta un 40 por ciento, montos que actualmente se hacen insostenibles y que podrían generar el cierre de una importante cantidad de negocios.
Asegura que en un principio los corporativos vieron esta opción como viable para poder tener seguras sus instalaciones, esto tomando en cuenta que el problema tendría solución a mediano plazo, sin embargo ante la poca efectividad de los tres niveles de gobierno de dos sexenios, esto complicó el panorama económico y se extendió por más días la inseguridad y con ello el gasto que ahora ya no pueden solventar.
Ante este panorama, asegura que la Iniciativa Privada de la frontera es la que está en mayor riesgo de quebrar por la inseguridad, ya que es precisamente en este punto de la república donde la mayor actividad delincuencial se concentra, lo que pone en una situación más compleja a los sectores productivos tanto empresariales, como otras áreas, tales como la agricultura, pesca y ganadería.
Es un gasto nacional
Recordó que, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía, el costo de la inseguridad y el delito alcanzó una cifra de 236 mil millones de pesos en 2015, lo que representa 1.2 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), y según las estimaciones de los empresarios las afectaciones pueden llegar a 9 por ciento del PIB si se incluyen los costos que reportan los afiliados a las cámaras.
El especialista entrevistado dijo que es vital que los legisladores ubiquen como prioridad en su agenda la aprobación de medidas de seguridad pública, las cuales -afirma-, se han politizado y pospuesto manejarse con tintes políticos, por lo que advierte que de seguir en esa tónica la quiebra de empresas es inminente.
Inestabilidad social
Para Javier Heredia, sociólogo, la situación del país no solamente se concentra en el tema económico, ya que la inestabilidad social es latente, esto derivado de una gran manifestación de inconformidades de la ciudadanía que van desde los bloqueos, marchas y hasta linchamientos y aplicación de justicia por su propia mano.
Asegura que esto igualmente tiene repercusiones en las distintas actividades económicas, de las cuales advierte que de no haber una contención en estos problemas, la clase empresarial podría caer en un abismo de contracción aún más acentuado del que ya vive, y con ello desatarse una ola de despidos en el país.
Mario Alberto Hernández
