Cuidan el país 14 mil policías militares; combaten huachicoleo, entre otros delitos

Desde febrero, efectivos de Sedena y Semar patrullan ciudades violentas, como Tijuana, Acapulco y Ecatepec

Pese a que aún no se ha formalizado legalmente la creación de la Guardia Nacional, más de 14 mil policías militares y navales están desplegados en diferentes localidades del país, en apoyo a labores de seguridad pública y de combate al robo de combustible.

En apoyo a las 17 regiones donde ha habido un incremento de la violencia criminal, al inicio de la presente administración, las secretarías de la Defensa Nacional y de Seguridad y Protección Ciudadana han enviado personal de apoyo a los municipios afectados.

Desde febrero pasado, personal militar se ha sumado a la vigilancia en ciudades violentas, como Tijuana, Juárez, Manzanillo, Ecatepec, Salamanca, Acapulco, Irapuato, Uriangato y Celaya.

Erubiel Tirado, especialista en Fuerzas Armadas y coordinador del Programa Seguridad Nacional y Democracia de la Universidad Iberoamericana, indicó que debe aclararse si este personal pasará en automático a formar parte de la Guardia Nacional.

“Eso contradice lo que ellos dicen en corto, porque han afirmado que son más de 50 mil elementos apoyando a la seguridad pública. Eso es algo que deben definir, ¿estos que están en la calle van a ser absorbidos por la Guardia Nacional?

“¿Van a ser parte del cuerpo, van a ser ese núcleo que cimiente la Guardia Nacional, y en qué sentido?, eso no lo han definido. Vamos a ver si lo aclaran”, comentó.

La Secretaría de Marina Armada de México ha desplegado a dos mil 788 efectivos en funciones de policía naval en apoyo de la seguridad pública en 34 coordinaciones regionales de 17 estados costeros.

El despliegue militar se realiza pese a que todavía no se ha formalizado la creación de la Guardia Nacional, aunque la reforma constitucional ya fue aprobada en el Congreso y en todas las cámaras locales.

Falta ley orgánica

Aun cuando el presidente Andrés Manuel López Obrador promulgue la reforma que crea la nueva corporación, no podrá entrar en operación, pues falta su Ley Orgánica y el Manual del Uso de la Fuerza.

“La Ley Orgánica, en términos simples, es como la letra chiquita de la Guardia Nacional, ahí vamos a enterarnos realmente de la verdadera militarización del esquema de seguridad. Tiene diversas definiciones pendientes, que deberían ir de la mano del compromiso político que se tuvo en la reforma constitucional de que no militarizará la seguridad nacional”, explicó Tirado.

El académico, analista en el tema de Fuerzas Armadas, destacó que hasta el momento lo que se sabe es que el reclutamiento y la formación de los nuevos elementos de la Guardia Nacional estará a cargo de la Sedena, lo que “es un contrasentido, para un cuerpo de seguridad que tiene que ser civil”, comentó.

Erubiel Tirado indicó que otra definición que deberá aclarar la Ley Orgánica de la nueva corporación está relacionada con su estructura de mando, la que el presidente López Obrador comentó podría ser encargada a un militar en condición de retiro y no en activo.

“Piensan similar y darle la vuelta al mandato constitucional, nombrando a personales y oficiales de origen militar pero que estén en retiro o en licencia, ya con eso dicen que son civiles, es un contrasentido y una mentira.

“Las leyes militares nunca dejan de reconocerle la condición de castrense a sus miembros, entonces eso quiere decir que siguen supeditados a una estructura de mando militar”, explicó.

Un elemento de la Policía Militar, quien solicitó el anonimato, explicó que el personal únicamente ha manifestado su intención de no ser “primer respondiente” ante casos en los que intervengan, ya que eso los obligaría a declarar en un proceso penal.

Pero esto quedaría resuelto, explicó, con la participación del personal de la Policía Federal, capacitado en la oralidad del sistema de justicia penal acusatorio.

 

Agencias.