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Ante las condiciones de abandono y riesgo en las que permanecen, a la intemperie y durante la mayor parte del día cientos de migrantes que acuden a diario al bordo del río Bravo y en las instalaciones federales del Puente Internacional Puerta México, paramédicos de Protección Civil y Bomberos ofrecieron revisiones y asistieron a mujeres, niños y hombres migrantes.
Karla García Rubio, una de los dos paramédicos de Protección Civil que asistían ayer a los migrantes, dijo que son frecuentes encontrar durante estas visitas en este cruce internacional a personas extranjeras con síntomas y cuadros de golpe de calor, insolación, “se les baja mucho la presión, muchos tienen deshidratación”, dijo.
Advirtió que uno de los problemas más delicados que observan en materia de salud en este lugar, es que muchos de los pacientes que tienen alguna enfermedad no están medicados, “son hipertensos, por ejemplo, los diabéticos no llevan su control y medicamentos a su tiempo”.
“La verdad, la mayoría no están control de su salud, no traen sus medicamentos, también muchos tienen infecciones gastrointestinales y en la piel, salpullido, prurito”, advirtió Karla Rubio.
Piden reportar emergencias
Manifestó que es importante que las personas que requieran ayuda pueden reportar cualquier emergencia al número telefónico 911, o a Protección Civil y Bomberos directamente al número telefónico 812-00-03.
El director de Protección civil, Pedro Astudillo Bravo, precisó que acudieron antes del mediodía, para ofrecer asistencia a las personas.
Desde la mañana, después de que se cruzaran algunos migrantes por el río Bravo, efectivos de la Guardia Nacional, Secretaría de Marina y de la Secretaría de la Defensa Nacional resguardaron el área bajo el Puente Nuevo Internacional por donde cruzaron las personas, mientras que otros efectivos efectuaron tareas de vigilancia en poco más de un kilómetro del bordo.
