Advierte la industria automotriz no se dejará intimidar por Trump

20/01/2017 – No saldrán empresas proveedoras de la industria automotriz de Matamoros ante las amenazas de Donald Trump, así lo aseguró Manuel Gracia Garza, miembro de la mesa directiva de Ciudad Industrial, quien comentó que durante la pasada reunión que sostuvieron con gerentes y propietarios de plantas, manifestaron que no hay intención de abandonar la localidad.
De acuerdo con el representante del sector de la industria maquiladora, asegura que más del 80 por ciento de las plantas que operan en esta localidad son del ramo automotriz, perfil que aun y cuando es el sector que más ha presionado el presidente electo que hoy toma poder del gobierno de Estados Unidos, estos aseguran que no se dejarán intimidar.
Explica el miembro de la mesa directiva de los parques industriales, que se llevarán a cabo reuniones con más gerentes y propietarios de plantas que operan en la ciudad, esto para definir una agenda de trabajo y una estrategia de mutua colaboración, y evitar que el nuevo gobierno americano que inicia hoy, pueda afectar a este sector en los próximos días.

Se hacen acuerdos frontera norte
Manuel García Garza, asegura que pláticas de este tipo y convenios muy similares, se están llevado a cabo en otros puntos de la frontera a lo largo de los 3 mil kilómetros que la conforman, ya que al igual que esta región, asegura que la industria automotriz es un perfil industrial que prevalece en toda la zona norte del país.
Explica que las plantas que están haciendo acuerdo de permanecer en territorio nacional y seguir operando, se trata de compañías de autopartes, mismas que tiene contratos con las grandes armadoras a quienes les manufacturan las piezas de los automóviles, condición que asegura no están tan comprometidos con el nuevo gobierno.

Llega impuesto nuevo
De acuerdo con Rubén Treviño, vicepresidente de Comercio Internacional, señala que el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, amenazó con fuertes impuestos a las empresas estadounidenses que mudan sus operaciones al exterior e intentan seguir vendiendo sus productos en Estados Unidos.
Indica que hay la amenaza de que a partir del viernes se aplicará un impuesto del 35% a los productos vendidos en Estados Unidos por cualquier empresa que despidió a trabajadores estadounidenses, o que construyó una fábrica o planta en otro país.

Agencias