Adelgazo, engordo, adelgazo, engordo…

17/05/16.-Una de cada tres personas en el mundo tiene sobrepeso y millones se la pasan haciendo dietas. Pero el 80% de los que logran bajar de peso, con el tiempo lo volvemos a ganar.

El secreto es sencillo: desarrollar nuevas rutinas que se convierten en nuevos hábitos.

¿Qué nos está engordando?
Estos son algunos de los factores clave que influyen en el aumento de peso.

Evolución
Hemos desarrollado señales fuertes para el apetito, pero respuestas débiles para la satisfacción.

Hábitos
El 40% de nuestra conducta es subconsciente.

Hormonas
Cuando perdemos peso, nuestro cuerpo intenta compensar intensificando la producción de las hormonas del apetito. El nivel de la hormona del hambre grelina aumenta en un 20% hasta 40 semanas después de la pérdida de peso, mientras que el de las hormonas que suprimen el hambre es más bajo.

Entorno
Las ofertas especiales están por todas partes: entre más compramos, más comemos.

Actitud
A menudo, un sólo desliz hace que abandonemos la dieta. En lugar de aceptar uno que otro revés, comemos aún más, lo que desencadena el mismo resultado que estábamos tratando de evitar.

Nuestra memoria graba rápidamente los hábitos y los conserva, en particular aquellos establecidos en la infancia y los que tienen relación la comida.

Trucos para volverse adicto a lo bueno
Los buenos hábitos pueden ser tan adictivos como los malos.

Una vez programes nuevos comportamientos y estos se vuelvan rutinarios,mantener tu peso ideal será mucho más fácil.

++++

Estos consejos te pueden ayudar.

Reglas: la pérdida de peso implica la creación de reglas para ti mismo. Si las cumples durante el tiempo suficiente, se convertirán en nuevos hábitos saludables.

Mantener el control: una vez hayas alcanzado tu peso ideal puedes aumentar la cantidad de comida, pero sin descuidarte. Si comes más un día, recorta el siguiente.

Pesarse a diario: fija tu peso y no te excedas en más de un kilogramo. Si ganas peso de nuevo, vuelve a bajarlo.

Darse tiempo: trata de perder de peso durante un período de tiempo, y luego ten un período de permanecer estable antes de volver a intentar bajar más kilos.

Compromiso: en promedio se tarda uno o dos meses para formar un hábito, pero esto puede variar mucho entre las personas, desde 18 a 254 días.

Repetir, repetir, repetir: la consistencia forma hábitos y hace que se peguen. Recuerda que comer de forma saludable es un cambio de estilo de vida, no una dieta.

Aleja la tentación: saca de tu casa los alimentos poco saludables. Reemplázalos con alimentos que combaten la enfermedad, tales como frutas y verduras.

A moverse: la cantidad más pequeña de ejercicio es beneficiosa.

¿Tus amigos te engordan?: trata de pasar tiempo con personas que tienen los hábitos que deseas adquirir.

Agencias/El Bravo